Caso de violencia: Ortigoza se va de San Lorenzo
El mediocampista paraguayo, Néstor Ortigoza, ha decidido poner fin a su vínculo con San Lorenzo tras un incidente de violencia que lo involucró. El futbolista, que se encontraba en la mira del club desde hace tiempo por su comportamiento fuera de las canchas, fue denunciado por su propia esposa, quien lo acusó de violencia de género.
La decisión de Ortigoza de abandonar el club se tomó luego de una reunión con el presidente, Marcelo Tinelli, en la que se acordó la rescisión del contrato. La salida del jugador, que tenía vínculo con el club hasta junio de 2023, se produce en medio de un clima de gran tensión y polémica.
La denuncia de la esposa de Ortigoza, que detalla un episodio de violencia física y verbal, ha generado un gran revuelo en el entorno del club. La noticia ha sido recibida con indignación por parte de la afición, que no solo condena el accionar de Ortigoza, sino que también cuestiona la gestión del club ante un caso tan delicado.
La salida de Ortigoza no solo representa un golpe para el equipo en términos futbolísticos, sino que también pone en evidencia la necesidad de un cambio de paradigma en el trato de los casos de violencia de género dentro del fútbol argentino. La justicia debe actuar con rapidez y contundencia para que estos hechos no queden impunes y se garantice la protección de las víctimas.
Un antecedente complicado
No es la primera vez que Ortigoza se ve envuelto en un escándalo. En 2017, ya había sido denunciado por una mujer que lo acusó de violencia doméstica. En ese entonces, la situación no tuvo repercusiones legales, pero sí generó un fuerte cuestionamiento hacia el jugador por parte de la prensa y los fans.
Un llamado a la reflexión
La salida de Ortigoza de San Lorenzo nos obliga a reflexionar sobre el rol que juega el fútbol en la lucha contra la violencia de género. El deporte, en lugar de ser un refugio para los agresores, debe convertirse en un espacio de concientización y prevención.
Es fundamental que los clubes de fútbol tomen medidas concretas para abordar este problema de manera eficaz. La implementación de protocolos de actuación, la creación de programas de apoyo a las víctimas y la promoción de campañas de sensibilización son algunos de los pasos que se deben dar para construir un fútbol más justo y equitativo.
La sociedad en su conjunto debe trabajar para erradicar la violencia de género. La salida de Ortigoza de San Lorenzo es un llamado a la acción para que todos juntos nos comprometamos en esta lucha.
