Violencia de género: San Lorenzo aparta a Ortigoza
El Club Atlético San Lorenzo de Almagro ha tomado la decisión de apartar al jugador Néstor Ortigoza del plantel profesional tras las denuncias por violencia de género realizadas en su contra. La decisión se tomó luego de que la justicia iniciara una investigación por las acusaciones de su expareja, quien denunció agresiones físicas y psicológicas por parte del futbolista.
La denuncia:
La expareja de Ortigoza, cuyo nombre se mantiene en reserva para proteger su identidad, presentó una denuncia formal ante la justicia argentina. En ella, acusa al jugador de haberla agredido física y psicológicamente durante el transcurso de la relación.
La investigación:
La Fiscalía especializada en violencia de género de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a cargo de la Dra. Andrea Bonnin, se encuentra investigando el caso. Se han realizado diferentes medidas, incluyendo la toma de declaración a la denunciante y la realización de peritajes psicológicos.
La decisión de San Lorenzo:
El club, a través de un comunicado oficial, ha expresado su repudio a cualquier acto de violencia de género, y ha dejado en claro que "no tolerará ningún tipo de comportamiento que atente contra los valores de respeto y equidad". Además, se ha confirmado que Ortigoza no podrá participar en ningún tipo de actividad relacionada con el club hasta que se esclarezca la situación.
El contexto:
Esta situación se produce en un contexto de creciente lucha contra la violencia de género en Argentina. El país ha sido escenario de numerosas manifestaciones y campañas de concientización, buscando erradicar este tipo de violencia que afecta a miles de mujeres.
Reflexiones:
Este caso pone de manifiesto la importancia de denunciar la violencia de género, sin importar la posición social o la profesión del agresor. La sociedad debe actuar con firmeza para proteger a las víctimas y luchar contra la impunidad.
San Lorenzo ha dado un paso importante al apartar a Ortigoza del plantel, demostrando un compromiso con la lucha contra la violencia de género. La decisión del club es un ejemplo a seguir para otras instituciones y organizaciones, que deben actuar con responsabilidad y celeridad ante estas situaciones.
