Leo Díaz: ¿Qué pasó con el joven de River?
Leo Díaz fue una de las grandes promesas que surgieron en las inferiores de River Plate a principios de la década del 2010. Su talento y capacidad goleadora lo llevaron a ser considerado como una de las futuras estrellas del club, pero su carrera no siguió el camino esperado. ¿Qué pasó con el joven delantero?
El ascenso y la promesa:
Díaz debutó en Primera División en 2013 con River, bajo la dirección técnica de Ramón Díaz, el mismo hombre que lo había llevado a las inferiores del club. Sus primeros pasos en el fútbol profesional fueron prometedores, con algunos goles importantes que lo posicionaron como una alternativa para el equipo. Sin embargo, la competencia por un lugar en el ataque era dura, con jugadores como Teófilo Gutiérrez, Rodrigo Mora y Lucas Alario en la delantera.
La salida y el camino en el exterior:
Tras la llegada de Marcelo Gallardo como DT, Díaz tuvo pocas oportunidades y decidió buscar nuevos horizontes. En 2016, partió rumbo a México para jugar en el Club Tijuana. En el país azteca, Díaz tuvo un buen rendimiento, convirtiéndose en uno de los delanteros más importantes del equipo. Sin embargo, su estancia en México duró poco, y en 2018 se trasladó al Club Atlético Belgrano de Argentina.
Un regreso frustrado y la actualidad:
En 2019, Díaz regresó a River Plate, con la ilusión de volver a brillar con la camiseta millonaria. Pero esta vez, las cosas no salieron como él esperaba. La falta de continuidad y las lesiones le impidieron mostrar su mejor versión, y su paso por Núñez terminó siendo breve.
En la actualidad, Díaz juega en el Club Atlético Aldosivi de Mar del Plata, donde busca recuperar su mejor nivel.
¿Qué pasó con la promesa de River?
La carrera de Leo Díaz es un ejemplo de cómo el fútbol puede ser complejo y lleno de obstáculos. Talento y capacidad no siempre son suficientes para llegar a la cima. A pesar de su talento y los momentos de brillo que tuvo, Díaz no logró consolidarse en River Plate ni en otros equipos.
Es difícil saber qué hubiera pasado si Díaz hubiera tenido más oportunidades en River o si hubiera elegido un camino diferente. Lo que sí es seguro es que el delantero todavía tiene mucho por dar y que su carrera, aunque no haya llegado a las expectativas iniciales, aún puede tener un final feliz.
